(Hay un pequeño silencio antes de repartir de nuevo las
cartas, vemos a Duvi pensativa que está tramando alguna cosa mientras le van
llegando las cartas...)
Duvi: Yo pongo a mi
Alemán
Belén: ¡¿Qué
alemán?!, pero si todavía no has conocido a ninguno.
Duvi: Bueno,
aceptadlo como un pagaré… ¿Conocéis a algún hombre que se me haya resistido?
Belén: No puedo ver
la apuesta.
Duvi: ¿No tienes a
ningún tio?
Belén: No.
Duvi: Qué tu no
tienes a ningún tio?
(Belén deja las cartas en la mesa)
Belén: Bueno
tampoco me importa demasiado no poder jugar esta partida.
(Duvi se la queda mirando durante unos instantes, después
con su habitual filosofía suelta su parrafada mientras juega sola con Paloma... Iremos viendo las caras
de las dos mientras oímos lo que dice Duvi...)
Duvi: Bah, los
hombres son como las cartas... las meneas un poquito, las organizas y juegas...
Siempre puedes apostar por tu juego o retirarte...
Paloma: Oh...
Duvi: Y cuando está
acabando la partida, te puedes descartar de aquellas cartas que no te sirven
para nada...
Belén: Creo que
debería irme a Alemania contigo...
Duvi: Además,
siempre tengo alguna carta –un as- que me he reservado por si acaso... Qué
tienes?
Paloma: Nada, dos
reyes y un as. (Echa las cartas encima de la mesa)
Duvi: (Va
dejando las cartas de una en una) Póquer
de reinas... He ganado!! Me quedo con tu Manu, lo siento Paloma... (Le pasa
la carta que marca el as) ¿me das el
número?
(Vemos como Paloma le anota el número en la carta.)
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada